Planta de selección de envases

COGERSA
Oviedo, 2019
El Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) aprobó en marzo de 2018 el desarrollo de varias obras para avanzar en la mejora de la gestión de los residuos con un presupuesto superior a los 5 millones de euros. La primera de las actuaciones era la modernización de la planta de reciclaje de envases (contenedor amarillo) para poder tratar hasta 25.500 toneladas al año. Cogersa, que ya había recibido unas 11.000 toneladas en 2017, preveía en su Plan Estratégico de Residuos una recepción anual de unas 25.000 los siguientes años, por lo que la inversión se fundamentó en garantizar el tratamiento adecuado de todos los residuos de envases que serían generados los próximos años.
Las obras consistieron en la modernización total de la planta, aumentando la capacidad de tratamiento hasta 7 toneladas por hora, y en la dotación de nuevos equipos de selección, además de la automatización de la instalación y la mejora de las condiciones de seguridad de los trabajadores.
Pero el reto más grande de esta obra fue realizarla en tan solo 182 días de proyecto, a la vez que cumpliendo con la exigencia y todas estas especificaciones que requería la singularidad de la obra. Para poder cumplir con los timings, se tuvo que desarrollar un sistema de trabajo a doble turno que requirió de una gran coordinación con los diferentes actores del proyecto. Aun con todas las dificultades presentes, el proyecto finalizó con éxito el diciembre de 2019 y la planta ya funciona en normalidad desde inicios de este año 2020. Se calcula que a mes de marzo ya ha procesado 7.000 toneladas de residuos plásticos garantizando así el correcto reciclado de estos materiales en Asturias.
Las obras consistieron en la modernización total de la planta, aumentando la capacidad de tratamiento hasta 7 toneladas por hora, y en la dotación de nuevos equipos de selección, además de la automatización de la instalación y la mejora de las condiciones de seguridad de los trabajadores.
Pero el reto más grande de esta obra fue realizarla en tan solo 182 días de proyecto, a la vez que cumpliendo con la exigencia y todas estas especificaciones que requería la singularidad de la obra. Para poder cumplir con los timings, se tuvo que desarrollar un sistema de trabajo a doble turno que requirió de una gran coordinación con los diferentes actores del proyecto. Aun con todas las dificultades presentes, el proyecto finalizó con éxito el diciembre de 2019 y la planta ya funciona en normalidad desde inicios de este año 2020. Se calcula que a mes de marzo ya ha procesado 7.000 toneladas de residuos plásticos garantizando así el correcto reciclado de estos materiales en Asturias.
